Por Celia Blanco Pérez
El fútbol no se trata solo de ganar o perder: también es amistad, recuerdos y la sensación de formar parte de algo más grande. En CIS University, el equipo se ha convertido en una segunda familia para muchos jugadores, ayudándoles a integrarse en la vida universitaria y a crear vínculos para toda la vida. Esta temporada ha sido especialmente memorable, ya que el equipo se coronó campeón de la Madrid Fútbol Emotion MF7 League y subcampeón de la Futbolempresas League. Hablamos con Konrad Krysztoforski, estudiante internacional procedente de EE. UU., y Pedro Rosa, estudiante español en su último año en CIS University, sobre su recorrido con el equipo. Ambos comparten qué significa para ellos este deporte y cómo ha marcado su paso por la universidad.
¿Qué os motivó a uniros al equipo de fútbol? ¿Lo teníais claro antes de comenzar en CIS University?
Konrad: Juego al fútbol en Endicott College, en Estados Unidos, así que para mí era importante seguir jugando mientras estudiaba en el extranjero. Ya sabía que me apuntaría antes de llegar a CIS University porque el fútbol siempre ha sido una parte muy importante de mi vida. Me ayuda a mantenerme centrado y conectado, esté donde esté.
Pedro: Siempre supe que quería seguir jugando al fútbol en la universidad, y fue Nacho Campo quien me animó a unirme al equipo. Era la oportunidad perfecta para mantenerme activo y formar parte de un entorno competitivo pero también divertido.
¿Recordáis vuestro primer partido con el equipo? ¿Cuál fue vuestra primera impresión?
Konrad: Recuerdo perfectamente mi primer partido con el equipo 7v7 de CIS University. Lo pasé genial y salí muy contento. El equipo fue muy acogedor desde el principio, y enseguida noté que había buen ambiente. Todos me apoyaron, y eso me hizo sentir cómodo desde el primer día.
Pedro: Mi primer partido no fue el mejor, estaba muy nervioso y no jugué bien. Pero eso me motivó aún más a mejorar y a esforzarme para integrarme de verdad en el equipo.
¿Os ha ayudado el equipo a integraros mejor en la universidad y a hacer nuevos amigos?
Konrad: Sí, totalmente. Aunque jugaba con varios amigos de antes, también pude conocer a gente nueva que veía en clase. Esa experiencia compartida en el campo hizo que fuera más fácil conectar fuera de él también.
Pedro: Sin duda. Conocer a nuevas personas a través del fútbol hizo mucho más fácil adaptarme a la universidad. Una vez que creé amistades dentro del equipo, cada partido se volvió aún más divertido.
¿Cómo describiríais la química dentro del equipo?
Konrad: Creo que la química es excelente. No siempre jugamos con los mismos compañeros, pero todos con los que he compartido campo han sido muy acogedores y dispuestos a jugar en equipo. Se nota que hay una comprensión mutua y respeto por el estilo de juego de cada uno, lo que facilita mucho la conexión, dentro y fuera del campo.
Pedro: La química es muy fuerte, especialmente porque algunos llevamos años jugando juntos. Aun así, siempre estamos abiertos a recibir a nuevos jugadores.
¿Qué tipo de relación tenéis con vuestros compañeros fuera del campo?
Konrad: El fútbol crea relaciones muy sólidas. Siempre que me cruzo con algún compañero fuera del campo, nos saludamos o charlamos un rato. Me alegra verlos. A veces quedamos para comer o pasar el rato, y esos momentos refuerzan aún más el vínculo. Es bonito tener ese sentido de comunidad.
Pedro: Nuestra amistad va más allá del terreno de juego. Independientemente del resultado, siempre intentamos vernos después de los partidos, lo que ha contribuido a crear un fuerte espíritu de equipo.
Habéis competido en dos ligas: Madrid Fútbol Emotion MF7 y Futbolempresas. ¿Cómo ha sido vuestra experiencia en cada una?
Konrad: La verdad es que no he notado mucha diferencia. No importa la competición, siempre salgo al campo a competir y a disfrutar. El objetivo es dar lo mejor de mí, y tanto en Madridfutbol7 como en Futbolempresas, el reto y la emoción fueron los mismos.
Pedro: Ambas ligas están muy bien organizadas, ya que las gestionan las mismas personas, pero Madridfutbol7 es especial porque fue la primera liga en la que competimos.
¿Qué significó para vosotros ganar el campeonato de la Fútbol Emotion MF7 League?
Konrad: Significó mucho. Llegar a cualquier final ya es un logro, y ganarla es aún mejor. Es una muestra de que el esfuerzo que hemos puesto como equipo ha dado sus frutos. Llegar tan lejos demuestra que tenemos algo especial.
Pedro: Es una sensación increíble porque refleja todo el trabajo y la dedicación que hemos puesto como equipo. Cada partido eliminatorio estuvo lleno de tensión y emoción, lo que hizo que el camino hasta la final fuera aún más gratificante.
¿Cuál ha sido el momento más emocionante de la temporada?
Konrad: Mi primer hat-trick, ¡los tres goles de cabeza! Estaba muy feliz, y mis compañeros también lo celebraron mucho. Fue uno de esos partidos en los que todo encaja, y ver a mis compañeros felices por mí lo hizo aún más especial.
Pedro: Sin duda, ganar la final fue el mejor momento. Ya llegar a otra final era un logro, pero levantar el trofeo tras una competición tan exigente fue aún mejor.
¿Cómo os ha influido jugar con compañeros internacionales?
Pedro: Tener compañeros de distintas nacionalidades ha enriquecido mucho la experiencia. Me ha permitido aprender de otras culturas y formas de ver el mundo, tanto dentro como fuera del campo.
Konrad, como estudiante internacional, ¿cómo ha influido el fútbol en tu proceso de adaptación a un nuevo país y cultura?
Konrad: El fútbol lo es todo para mí. Es un deporte internacional que une a las personas. Estoy muy feliz de poder jugar aquí, y sin duda me ha ayudado a adaptarme a España y a su cultura. Es un lenguaje universal: cuando estás en el campo, no importa de dónde vengas. Esa conexión a través del juego hizo que me sintiera más integrado y en casa.
¿Qué habéis aprendido de esta experiencia con el equipo?
Konrad: He aprendido que no hay mayor alegría que competir con amigos y que con un balón en los pies puedo expresarme de verdad. También me ha enseñado sobre resiliencia y trabajo en equipo: saber mantener la calma bajo presión y confiar en los compañeros, pase lo que pase.
Pedro: Personalmente, he aprendido que compartir un objetivo común fortalece vínculos que pueden durar años. A nivel deportivo, me he dado cuenta de la importancia de mantener un estilo de vida saludable para rendir bien y aportar al equipo.
¿Creéis que las habilidades y valores adquiridos os servirán fuera del fútbol?
Konrad: Por supuesto. Toda experiencia influye en el desarrollo personal. He creado nuevas amistades y vivido momentos que recordaré siempre. El fútbol me ha enseñado sobre liderazgo, comunicación y cómo afrontar desafíos, cosas que me ayudarán tanto en lo personal como en lo profesional.
Pedro: Sin duda. Saber cómo crear un equipo fuerte y unido con personas de orígenes distintos es una habilidad valiosa, no solo en el fútbol, sino también en cualquier entorno laboral o social.
Si pudierais revivir un momento de esta temporada, ¿cuál sería y por qué?
Konrad: Ganar la final, sin duda. Fue divertidísimo y todos estábamos eufóricos con la victoria. La energía y la emoción tras el pitido final fue increíble, abrazar a mis compañeros y celebrar juntos fue un momento inolvidable.
Pedro: Reviviría la primera final que perdimos. Fue un momento duro y decepcionante, y si pudiera repetir ese partido, me encantaría cambiar el resultado.
¿Qué significa este equipo para vosotros más allá de los resultados?
Konrad: Me encanta jugar al fútbol. Al final del día, gane o pierda, jugar a este deporte tan bonito es una alegría, y me siento afortunado de formar parte de este equipo. Las amistades y el sentimiento de formar parte de algo más grande que uno mismo es lo que realmente importa.
Pedro: Para mí, este equipo es como una familia. Muchos llevamos años jugando juntos, y aunque algunos ya han terminado la universidad, siguen viniendo a jugar. Eso demuestra lo especial que es este equipo para todos nosotros.
¿Qué consejo le daríais a los futuros jugadores que se unan al equipo?
Konrad: Les diría que si les gusta jugar al fútbol, no hay mejor decisión que unirse al equipo. Disfrutad cada momento y no dejéis de sonreír, porque nunca se sabe cuándo será vuestro último partido. Confiad en vuestros compañeros, dadlo todo y recordad que los recuerdos que creéis durarán mucho más allá del pitido final.
Pedro: Que se mantengan comprometidos y no dejen que el equipo se apague. Hay momentos en los que se tiene menos tiempo o motivación, pero la constancia es clave. Este equipo es algo realmente especial, y mantenerlo vivo vale totalmente la pena.