El Hip-Hop, también conocido como Rap, se ha convertido en el género musical más popular desde que en 2008 desbancó al Rock en las preferencias de escucha según la famosa plataforma Spotify.
Hace aproximadamente 50 años, el Hip-Hop se gestó en los barrios más desfavorecidos de Nueva York, como Harlem y el Bronx, donde afroamericanos y latinos canalizaban su creatividad a través del graffiti, el baile del “breakdance” y las primeras manifestaciones musicales del género.
Este movimiento artístico y cultural que fue originalmente invisibilizado y discriminado a causa de sus orígenes marginales, hoy en día no sólo es absolutamente hegemónico en el panorama musical, sino que se ha convertido en una lucrativa fuente de ingresos para todo tipo de artistas afines: músicos, productores, diseñadores de moda, promotores de conciertos y festivales, y por supuesto, emprendedores.
Para saber más acerca del Hip-Hop, así como los métodos para organizar y monetizar toda esta energía creativa, invitamos al estudio de CIS University Podcast, a Pedro Henrique, co-fundador de Urban Roosters, la mayor comunidad global del Rap en lengua hispana, y uno de los foros más influyentes sobre este estilo músical.
— “Nosotros éramos unos forofos del Hip-Hop. Veníamos del mundo de la Publicidad, generando ideas para clientes y veíamos que nuestro estilo musical favorito carecía de estabilidad o de un marco regulatorio que aportara ingresos estables a los que se iniciaban en este sector.”
Lo que muchos desconocen es que, a diferencia de otras competiciones como los e-Sports, u otras disciplinas deportivas como el tenis, el Rap carecía de un sistema de ranking internacional que reconociera y valorara adecuadamente a los artistas de este género, dotándoles de visibilización, ingresos estables por competiciones y patrocinios.
Urban Roosters crea las Competiciones de Estilo Libre FMS
Con este “gap” en mente, y utilizando Urban Roosters como plataforma, Pedro Henrique y sus socios crearon los primeros torneos profesionales que enfrentaban en duelos, -también denominados “peleas de gallos”-, a los artistas del rap en rondas eliminatorias. De esta forma, se establecía un ránking periódico y dinámico sobre quién era el mejor artista Hip-Hop de cada nación. Había nacido las Freestyle Master Series (FMS), presentes en España, Argentina, Chile, Colombia, Perú, México, el Caribe y Brasil.
Estas rondas de competición han profesionalizado el mundo del Rap, y han proporcionado un marco estructurado estable con un sistema de clasificación que antes era inexistente. Ahora, mediante los torneos, no sólo se dictamina quiénes son los mejores, sino que también se profesionaliza la actividad del rapero mediante premios, retribuciones e ingresos recurrentes. Esta iniciativa ha elevado el estatus de los artistas de Hip-Hop, llevando el mundo del Rap a un nuevo nivel de reconocimiento y profesionalización comparado con otro géneros de la industria musical.
— «A raíz de la explosión de internet hemos visto como surgían nuevos empleos como Youtuber, Gamer, Influencer… Nuestra visión es que los artistas que practican Rap tengan la opción de profesionalizarse, tengan ingresos estables como cualquier otro, y que les permita vivir de su pasión.”
Podría sonar como una misión casi imposible, pero las cifras de crecimiento y su expansión por 2 continentes y 7 países parecen estar dándoles la razón. Urban Roosters continúa desafiando los límites y transformando el panorama del Hip-Hop con su enfoque innovador, solidificando su posición como un pilar fundamental en la evolución y profesionalización de este género musical.
— “ Cuando termina una pelea de gallos, nos damos un abrazo; no hay ganadores ni perdedores, sólo queda el silencio y la admiración que nos tenemos entre nosotros. Eso es lo más importante que inculca el Rap: la superación y el respeto hacia ti mismo y los demás.”